¡No dejes que el juego te robe la alegría!

El juego puede ser divertido, pero cuando se convierte en una adicción, puede tener graves consecuencias en tu vida.

¿Cómo identificar si tienes un problema con el juego?

  • Piensas constantemente en el juego: No puedes dejar de pensar en tu próxima apuesta o en cómo recuperar lo perdido.
  • Necesitas apostar cada vez más para sentir la misma emoción.
  • Has mentido a tus seres queridos sobre tu juego.
  • Has puesto en riesgo tu trabajo, tus relaciones o tu salud por el juego.
  • Has intentado dejar de jugar pero no has podido.

Si te identificas con alguno de estos puntos, no dudes en buscar ayuda. Existen profesionales y grupos de apoyo que pueden ayudarte a superar esta adicción.

Recuerda: ¡Tú tienes el poder de cambiar tu vida! Busca ayuda y recupera el control.